LAS "MUJERES" EN LA POLICIA

Corre el año 1.980

La democracia se ha consolidado en España, y como tal, nuevos tiempos se avecinan, y con ellos unos cambios que eran inevitables.

1 de Mayo de dicho año. La primera promocion de la Democracia, se consolida como tal. 31 personas forman la misma, pero en ella hay una novedad.

Las "mujeres" por fin entran a formar parte de la estructura de la Policia Municipal en Sabadell.

Ocho mujeres entran en esa primera promocion. En la fotografia superior pueden verse a siete de ellas con el que era el Sargento Jefe del turno de la tarde, Sr. Benito Romero Jimenez.

Finalmente una de ellas no pudo consolidar su condición de Policia, por un problema fisico, mientras que otra de ellas tuvo que presentarse una seguna vez, al no poder hacerlo esa primera, por haberse quedado enbarazada.

La fotografia superior muestra a cuatro de las primeras "mujeres" de esa primera promoción.

En las siguientes dos fotografias, puede verse que en un primer lugar "las mujeres" fueron tratadas como tal y en la uniformidad se les asigno "una falda", por lo que ya desde un principio se les trato de una forma diferente a los demas.

Y no lo digo por lo que representaba en contra de los demas, si no hacia las propias compañeras que se sentian con ello discriminadas.

Esa falda, lo primero que propicio, fue dado su estrechez, una falta de movilidad y un stres para las compañeras, a la hora de poder subir o bajar del vehiculo policial.

A ello habia que sumarle, por poner un ejemplo, que tambien se les asigno unas camisas con abertura hacia el lado contrario al de los hombres, pero claro, no habian pensado que a la hora de ponerse la corbata, el pasacorbatas, estaba hecho hacia un lado concreto, por lo que al ponerselo las compañeras, el pasacorbatas quedaba hacia abajo. Un pequeño detalle.

A esa primera falda, que como puede verse en la fotografia superior, le siguio una segunda pero sin ninguna raya en los laterales, y a esta le siguio una tercera, por petición expresa de las propias compañeras.

Esa tercera falda, era del tipo "falda-pantalon", sin raya y mucha mas ancha que las que le precedian, por lo que la movilidad de las compañeras, subio muchos enteros.

Habrian muchas anecdotas que contar con respecto a las compañeras que entraron en esa primera promoción, o en la segunda por aumentar el tiempo en que duraron las mismas, pero de las que mas acontecian, eran los tipicos "machistas" que a la hora de ser parado y sancionado por una de las compañeras, solian indicar lo tipico de aquella época "que tu me va a multar, lo que deberias estar haciendo es estar en la cocina, y no poniendo multas".Las compañeras, con un temple extraordinario, pasaban de esas palabras y se limitaban a hacer su trabajo, no sin antes indicarle al infractor que los tiempos habian cambiado, que estabamos en otra época, y que se fueran haciendo a la idea de ello, ya que sus palabras siempre caerian en saco roto.

 Alguna que otra vez, el conductor no se conformaba con el insulto y el desprecio, y pasaban a actos mas graves, pero repito eran los minimos, y por suerte siempre quedo en anecdota que hoy por hoy se puede contar sin graves malos recuerdos.

No negare que habia algun que otro compañero, que se reia de ellas, o simplemente hacian comentarios, digamos que fuera de lugar, pero repito eran los minimos, y la gran mayoria de los veteranos, las trataron con respeto, admiración, y las ayudaron en todo los que le fue posible.

         

Algunas de ellas fueron asignadas a oficinas, una de ellas llego a ser motorista (lastima que no hay ninguna fotografia de ella, aunque en la fotografia de abajo, es la cuarta por la izquierda), y dos de ellas por ahora han llegado a ser Mandos de la Jefatura (una sub-Inspectora y una Cabo), pero todas ellas contribuyeron a que las mujeres que entraron posteriormente les fuera mucho mas facil su adaptación y que hoy en dia sean y trabajen tanto mas o mejor que cualquiera de los compañeros que formamos hoy dia parte de este colectivo.

Con el tiempo, esas primeras "mujeres", compañeras de trabajo y profesión, fueron tratatas como tal, como un compañero más, y un par de años mas tarde, se retiro la uniformidad de la falda, y se les asignaron pantalones como a todos los demas compañeros, se les cambio la clase camisa, dotandoles de las mismas que los demas, y en fin pasaron de esas primeras penurias que representaba ser del otro sexo.

Actualmente más de cuarenta mujeres forman parte de ese colectivo, pero la huella que dejaron esas "ocho primeras mujeres" perdurara en todos los compañeros que vivimos esa época y que nunca olvidaremos, porque para ellas fue mucho más duro que a los demas.